Entrevista

María Pérez: “Nos hemos centrado en facilitar medios digitales a los empleados públicos y mejorar la relación electrónica con la ciudadanía”

María Pérez Naranjo, Directora General de Transformación Digital. Junta de Andalucía

¿Cómo afrontan desde su Dirección la vuelta a la normalidad?
Para comprender qué significa la vuelta a la normalidad es imprescindible entender qué ha supuesto el periodo de confinamiento y desescalada. Ha sido para todas las áreas TIC una etapa muy agitada y precipitada debido a la llegada súbita del virus y la falta de tiempo para planificar y adoptar medidas de manera programada. Pero es cierto que desde el primer minuto vimos en los efectos colaterales de esta tremenda crisis sanitaria una gran oportunidad para avanzar de forma rápida en el uso de las tecnologías como soporte al trabajo en la Junta de Andalucía.

Por ello podemos decir que estos meses han sido muy muy intensos, pero se ha avanzado muy rápidamente y se han resuelto muchos obstáculos que, en otras circunstancias, habrían dilatado las actuaciones.

En este sentido, se ha actuado fundamentalmente en tres líneas.Por un lado, la dotación de equipos informáticos a través de la la adquisición urgente de portátiles y la provisión de equipos de sobremesa para que los empleados se los llevaran a sus casas en las condiciones óptimas de seguridad requerida. Asimismo en esta primera fase, un porcentaje considerable de empleados públicos ha puesto a disposición sus propios equipos personales.

En segundo lugar, facilitar la conectividad y las infraestructuras esenciales. En este punto, se han facilitado conexiones VPN a la práctica totalidad de los empleados públicos y se han reforzado las infraestructuras como el correo web, que en la semana del 14 de marzo se multiplicó por cuatro.

Y finalmente, se ha provisto a los empleados públicos de herramientas para la comunicación y colaboración habilitando sistemas de videoconferencia o poniendo en marcha un piloto de un sistema de comunicaciones electrónicas entre centros directivos en pleno confinamiento que ha facilitado el acceso de los funcionarios a la documentación y que en poco más de mes y medio ya ha gestionado más de 5.000 comunicaciones. Este sistema se va a ir desplegando a lo largo de este año por todos los organismos de la Junta de Andalucía.

El otro gran eje sobre el que pivota la gestión de la Dirección General es la propia ciudadanía que utiliza los sistemas de administración electrónica. En este sentido, hemos sido testigos de un incremento sin precedentes en la vía electrónica debido al confinamiento que conllevó el cierre de muchas oficinas públicas y la imposibilidad de desplazamientos. En los dos meses más estrictos de confinamiento las entradas electrónicas se incrementaron una media del 90%.

Durante estos meses, gracias al compromiso de los empleados públicos y a los medios puestos a su disposición, la Administración no sólo no ha visto ralentizada su respuesta, sino que ha puesto en marcha nuevas iniciativas entre las que destacamos, el portal de licitación electrónica, implantado el 20 de mayo y que, en menos de un mes, ha registrado más de 1.500 empresas e iniciado más de 60 licitaciones facilitando a los operadores económicos la relación electrónica con la Junta de Andalucía. También cabe destacar, el sistema de cita previa que, tras el inicio del desconfinamiento, ya da servicio a 217 oficinas de atención presencial y ha gestionado más de 48.000 citas.

¿Ha cambiado la pandemia sus prioridades de inversión en TIC? ¿Cuáles son esas prioridades ahora?
Ahora, tras la vuelta a la nueva normalidad, muchos de estos avances han llegado para quedarse y todo el trabajo realizado será aprovechado y consolidado. En este sentido se nos plantean dos retos inmediatos: debemos estar preparados para un hipotético nuevo confinamiento si la situación sanitaria así lo aconseja y debemos aprovechar el incremento de demanda de los servicios digitales para consolidar esta vía como la vía por defecto.

En cuanto al primero de los retos, trabajamos en un plan de contingencia y vamos a seguir reforzando la dotación de herramientas y dispositivos portátiles a los empleados públicos. La nueva normalidad va a significar también que debemos adoptar nuevas formas de trabajo: menos reuniones presenciales, mayor ubicuidad y alta disponibilidad de los servicios telemáticos. Todo ello va acompañado de un cambio cultural que tenemos que reforzar.

En cuanto al segundo reto, aprovechar el incremento de la demanda de los servicios digitales, la Dirección General de Transformación Digital continúa impulsando una mejora de los servicios actuales completándolos y mejorando su funcionamiento. Muchos ciudadanos han descubierto en este tiempo que muchas de sus gestiones con la Administración pueden realizarse de manera telemática y tenemos que conseguir que sigan utilizándolas.

Como decíamos, tenemos que hacer de la necesidad virtud. El confinamiento ha impulsado en semanas la adopción de soluciones digitales que hubieran costado años en condiciones normales. Ahora más que nunca hay que aprovechar ese impulso para ofrecer a la ciudadanía una Administración más ágil, más moderna y más cercana.