¿Cómo afrontan desde su Dirección la vuelta a la normalidad?
Tras las dificultades para conseguir que una organización como el Ayuntamiento de Logroño, con 850 empleados directos, pudiese teletrabajar de una manera ágil y efectiva, nos toca ahora sin ninguna pausa preparar la “vuelta a la normalidad”. Entre las áreas de mi concejalía se encuentran las de economía y hacienda, pero también la de conocimientos profesionales y la modernización tecnológica, con lo que la preparación de esta vuelta a la normalidad recae de lleno en la concejalía.
Lo primero de todo ha sido realizar un protocolo de seguridad para la desescalada y la incorporación del personal a sus puestos habituales, en los que el teletrabajo es una opción para aquellos colectivos de riesgo o las personas que por motivos de conciliación y cuidado de dependientes no puedan aún volver al trabajo presencial.
El teletrabajo fue un gran reto, sobre todo en unidades técnicas con necesidades informáticas más avanzadas, ya que los sistemas VDI que teníamos no estaban preparados en ese momento para soportarlos. Eso y los procesos manuales o soportados en papel que se realizaban, que hubo que adaptar a toda prisa a la nueva situación.
Queremos continuar con el proceso de modernización tecnológica e incrementar la velocidad de su implantación aprovechando que la necesidad se ha visto más que nunca en este momento.
¿Ha cambiado la pandemia sus prioridades de inversión en TIC? ¿Cuáles son esas prioridades ahora?
No han cambiado en absoluto. Afortunadamente, las necesidades estaban ya identificadas, y lo más importante, presupuestadas, por lo que en este momento nos estamos centrando en definir los requisitos, testear tecnologías y preparar las licitaciones, que con el corsé de la Ley de contratos del Sector Público y los importes que son nos hace que se dilaten las implantaciones en el tiempo más de lo que nos gustaría.
Los principales retos TIC que estamos afrontando en este momento son la aceleración de la digitalización de los procesos, la implantación definitiva y total de la administración electrónica y la modernización de nuestras infraestructuras TIC.
Las circunstancias actuales se han acelerado y todo el personal se ha involucrado totalmente en su desarrollo al advertir lo necesario que era prepararse para estas contingencias. Además, tenemos que estar preparados para posibles situaciones de rebrote de la pandemia.
¿Algo más que añadir?
Las implantaciones de verticales que se han realizado en la ciudad en cuanto a Smart city se han visto que pueden ser clave en ciertos momentos ante necesidades surgidas en la pandemia, sobre todo las relacionadas con servicios esenciales y los sistemas GIS.
También las necesidades que hemos tenido nos han hecho darnos cuenta de lo crítico que es que todas las implantaciones y sus datos sean interoperables, porque las necesidades de información correlacionada entre diferentes departamentos han sido críticas en determinados momentos, y el esfuerzo realizado para conseguir la información no debería ser tan costoso.